Un contrato temporal o contrato de duración determinada es un documento de carácter legal que establece una relación de trabajo entre la empresa y el trabajador por un periodo determinado de tiempo.
El contrato temporal consiste en la ejecución de una actividad laboral por un periodo de tiempo que no puede superar los 3 años, ya que tras ese tiempo el contrato de trabajo debería pasar a ser indefinido..
Los contratos de duración determinada pueden ser redactados y formalizados tanto de forma verbal como escrita. Salvo en algunos casos específicos, donde los contratos deben cumplir un tiempo de duración mayor a 4 semanas. Esta condición también aplica para aquellos contratos formativos, aquellos donde se ejecute un servicio determinado o aquellos contratos de trabajadores que se encuentren a distancia. En cualquiera de estos tipos de contratos, las partes involucradas deberán solicitar un contrato por escrito, para darle formalidad al ejercicio laboral.
El contrato temporal tiene como principal característica el cumplimiento del trabajo por un tiempo de duración limitada. Si este supera el tiempo acordado, ya no es considerado como contrato de duración determinada, pasando a ser un contrato indefinido. De igual manera, el contrato debe ser formalizado de manera escrita y firmados por ambas partes, tanto el trabajador como el empleador.
Los contratos de duración determinada conllevan una amplia gama de beneficios aportados a las empresas. Una de las ventajas más destacadas que este tipo de contratos es que permiten sustituir a otros trabajadores de forma temporal, a través de un contrato de interinidad. Estos contratos a su vez traen consigo las mismas características y beneficios hacia los trabajadores que cualquier contrato realizado de forma indefinida.
Algunas particularidades con la que cuentan los contratos de duración determinada son las siguientes:
Los contratos temporales solo sólo se formalizarán como tales cuando entre las partes se llegue a un acuerdo de límite de tiempo en la ejecución de la actividad laboral. Estos además deben mantenerse bajo ciertas normas estipuladas por el Estatuto de los Trabajadores en los siguientes casos: